La alcaldesa de Benavides asegura que el problema quedará resuelto hoy

Las aguas sucias de Antoñán del Valle se están vertiendo sin depurar al río Órbigo desde la semana pasada. La apertura de una zanja en la entrada de las balsas de depuración ha provocado el malestar de buena parte de los vecinos.

El presidente de la Junta Vecinal de Antoñán, Aquilino Serrano Carrillo, asegura que el concejal del pueblo en el Ayuntamiento de Benavides, Feliciano Serrano Cantón, tomó la decisión de romper la entrada de la canalización a la zona de drenaje “y las ha conducido al desagüe general” que desemboca en el río Órbigo. Según el pedáneo, el concejal de Antoñán “ha hecho las cosas sin consultar con nadie” porque “dice que las aguas sucias rebosaban” y salían para el camino de concentración parcelaria, “pero yo pasé por ahí la semana pasada porque estuve regando y no vi que saliera para el camino”, señala el pedáneo.

La falta de mantenimiento y limpieza de las tres balsas de depuración situadas en el paraje conocido como El Toral al pie del desagüe general, ha provocado la obstrucción de la entrada, por eso “lo suyo es que las limpie el Ayuntamiento que es quien cobra el alcantarillado y hace su mantenimiento”, puntualiza Aquilino Serrano. De momento la junta vecinal no ha denunciado el caso al Seprona “porque esperamos que lo arreglen”.

Limpieza de lodos

La alcaldesa de Benavides de Órbigo, Ana Rosa Sopeña, precisa que “en cuanto nos hemos enterado le hemos dado solución. Mañana (por hoy) viene el camión de la Diputación para limpiar los lodos” y a continuación se cerrará la canalización que da entrada a los vertidos en la depuradora.

Según la regidora de la Ribera, antes de abrir la zanja “el agua salía igual” hacia el desagüe general porque al no desaguar en la zona de depuración, rebosaba por la conducción y “era un problema”.